Biiiip. Biiiip. Biiiiip. Un café rápido. Portazo y a la calle. La adrenalina a todo volumen, la mente ya un torbellino… Cada mañana nos lanzamos al mundo como vaca sin cencerro, sin pararnos ni un instante. Saltamos de la cama a las obligaciones. ¿Qué pasaría si empiezas el día sintiéndote más centrado, de una forma menos automática? Vamos a ver ocho formas de empezar el día con intención.
- Escribir un diario. De acuerdo con las investigaciones de la Universidad de Rochester, escribir un diario ayuda a manejar la ansiedad, reducir el estrés y la depresión. Muchas personas descubren que una manera de ayudar a priorizar lo que es más importante en la vida, también. ¿Qué mejor manera de empezar el día que revisando tus objetivos y aspiraciones?
- Un paseo meditativo. A diferencia de caminar a paso ligero o dar un paseo con un propósito, como sacar al perro, un paseo meditativo se centra en la experiencia de… caminar. Al pasear, toma conciencia de tu cuerpo en movimiento, y cada respiración que haces. Observar esto, así como el entorno que te rodea.
- Una meditación sentada. O, como alternativa al paseo meditativo, permítete estar muy quieto. Elija un lugar tranquilo para concentrarse en tu respiración. Simplemente eso. Aquieta el cuerpo y lleva toda tu atención a la respiración.
- Saludos al sol. Saluda al sol, estira los músculos y mejora su tono con el Surya Namaskar, una serie de 12 posturas de yoga unidas. Los yoguis serios hacen 108 rondas, el practicante ocasional puede aspirar a hacer al menos 12 (puedes empezar con menos, e ir subiendo poco a poco). Este ejercicio se realiza mejor con el estómago vacío, antes del desayuno.
- Lectura devocional. Pasar 10 minutos disfrutando del estudio de una obra que sea sagrada para ti, profundizando en tu concepto de espiritualidad de la forma que tú la entiendas.
- Ducha con aromaterapia. Utiliza un aceite esencial como el eucalipto, menta o romero para llenar tu día de energía. Pon en un paño humedecido con agua caliente unas gotas del aceite que te guste, e inhalar. O añade más gotas y pon el paño en el suelo de la ducha, donde los vapores irán subiendo al evaporarse.
- Pasa un rato con tu hijo. Disfruta de unos minutos de conexión, de calidad. Acurrucaros. Leer un libro. Color o juego. Tu hijo no va a tener esta edad mucho tiempo. ¡Disfrútala!
- Cantar. Ya se trate de una canción melódica o una canción de Shakira, cantar puede liberar endorfinas y hacer que te sientas relajado y listo para los desafíos del día.
¡Toma eso, despertador!
[ct_focus background=”#dd9d3b” gradient=”#dd9d3b” color=”light” style=”normal” animation=”zoomin”]¿Tienes alguna forma de empezar el día con intención? Compártela con nosotros en los comentarios.[/ct_focus]
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Traducción: Silvia de Vacaciones en Gredos
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